En una publicación cargada de indignación, Santiago, conocido como «Panchos El Pana», se refirió a una situación que le genera temor y frustración, recordando lo ocurrido en 2022. «Hago un esfuerzo todos los sabados y vienen a querer que cerremos»
La situación fue en la madrugada de este domingo, cuando un patrullero se acercó a su puesto y les indicó que debían irse, pues ya no podía estar después de la hora de cierre del boliche. «Le preguntamos a un móvil de Inspección qué había pasado y nos dijeron que a ellos no les avisaron nada», relató. Con rabia, agregó: «Hace tiempo pasamos por lo mismo, no nos dejaban trabajar y tuvimos que hacer un quilombo hasta que nos dejaron».
Este conflicto no es nuevo para los vendedores, ya en 2022 tuvieron que enfrentar una situación similar. En ese año, bajo la gestión del entonces secretario de Seguridad, Diego Solana, se intentó hacer cumplir una ordenanza que prohibía el funcionamiento de los puestos durante la madrugada. Esa decisión, que surgió tras varios incidentes violentos entre jóvenes egresados de los boliches, fue resistida por los pancheros, quienes temían que les impidieran seguir con sus trabajos.
«Lo único que queremos es poder trabajar, ofrecerle comida a la gente que sale de los boliches, pero siempre nos encontramos con obstáculos. Mientras tanto… ”, expresó Santiago. Además, recordó cómo en 2022, tras las protestas y la presión de los trabajadores, la situación se resolvió . Sin embargo, el temor sigue latente en él
En 2022, ante este panorama, los vendedores de comida presentaron una nota ante el Concejo Deliberante solicitando la evaluación y modificación de la ordenanza. «Nos parece una falta de respeto, se nos priva de trabajar, mientras que no se resuelven otros problemas de seguridad en la ciudad», afirmó Santiago, visibilizando las contradicciones entre las prioridades de la gestión local y las necesidades de los comerciantes.
«Solo queremos que lo que paso en 2022 no vuelva a pasar», culminó