El único detenido por el homicidio de Aquiles Castañarez evitó prestar declaración este martes ante la fiscal María del Valle Viviani. El joven de 29 años fue trasladado desde la comisaría local a la Defensoría Oficial, donde lo esperaba su abogado, el Dr. Alejandro Ares. Luego, ingresó a la sede fiscal a las 16:00 y se retiró alrededor de las 17:20 sin brindar testimonio.
Las imágenes captadas por cámaras de seguridad fueron clave en la investigación: registraron al acusado cuando regresaba de Emilio Frers 320 y abandonaba un vehículo incendiado antes de dirigirse a un departamento de las 104, donde reside su novia. Parte de la vestimenta secuestrada coincide con la que llevaba puesta en la madrugada del lunes 10 de febrero.
Se trata de Nicolás Bilo, de 29 años, un joven delincuentes con antecedentes penales desde muy temprana edad
En las últimas horas, personal de la DDI lo ubicó en un domicilio de las 104, donde intentó escapar arrojándose desde el primer piso, aunque fue interceptado en las inmediaciones. Al momento de su detención, se le incautaron zapatillas, una campera y un pantalón.
El testimonio de su pareja resultó clave para la causa. Según detalló, el acusado salió alrededor de las 2 de la mañana y regresó pasadas las 6, completamente transpirado y con el calzado y parte de la ropa mojada. Posteriormente, entregó esas prendas a la Justicia. Además, una persona cercana a la víctima lo identificó.
La fiscalía lo acusa de «homicidio doblemente agravado por alevosía y criminis causa» , es decir, por haber accionado aprovechando la indefensión de la víctima y con el objetivo de ocultar otro delito. En las próximas horas, se espera que la fiscal Viviani resuelva su situación procesal y dicte la prisión preventiva.