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El fin de semana largo de Pascuas se convirtió en una pesadilla para una joven de San Pedro, quien, tras una noche lluviosa en la que decidió quedarse a dormir en la casa de una amiga, despertó con la puerta de su vivienda rota y sus pertenencias más valiosas robadas.

En un testimonio lleno de angustia, la joven relató que, al regresar a su casa (Caroni 1057) al día siguiente, «me encontré con la puerta reventada. Los vecinos me dijeron que un chico había estado preguntando por mí y que anduvo dando vueltas por el barrio toda la tarde», contó, revelando que esta es la cuarta vez que le roban.

A pesar de haber tomado medidas de seguridad como poner rejas, llaves y candados, la joven se enfrenta a la frustración de que nada ha evitado que le roben en múltiples ocasiones. «Todo me rompieron», lamentó.

En esta oportunidad, el robo fue aún más doloroso para ella, ya que le sustrajeron productos nuevos, entre ellos una notebook Lenovo IdeaPad1 gris y un Smart TV Hisense de 32″, ambos adquiridos con gran esfuerzo para su trabajo y estudios. «Todavía estoy pagando esas cosas, me costó mucho trabajo poder comprarlas», expresó con tristeza.

A pesar de haber denunciado los robos en todas las ocasiones, nunca ha podido recuperar lo que le han quitado. En esta ocasión, ha intensificado su búsqueda en plataformas como Marketplace, con la esperanza de que alguien que haya comprado sus pertenencias le devuelva al menos parte de lo perdido. «Quiero que me las devuelvan o que comprendan que son robadas. Son cosas que usaba para mi trabajo y estudio, como la compu», manifestó.

Con un fuerte llamado a la conciencia, la joven hizo un pedido: «Si la policía no los encuentra, que entre nosotros no nos metamos palos en la rueda. Todos somos laburantes», subrayó, buscando comprensión y empatía por parte de la comunidad.

Finalmente, expresó el miedo constante que enfrenta cada vez que regresa a su casa: «Vivo sola y cada vez que vuelvo, tengo miedo de que hayan vuelto a entrar y me roben lo poco que queda».