Este fin de semana, personal de Inspección General de la Municipalidad, en conjunto con la Unidad Táctica de Operaciones (UTO), llevó adelante operativos de control vehicular en distintos puntos de la ciudad. Como resultado, fueron retenidas 10 motocicletas, la mayoría identificadas previamente por protagonizar maniobras peligrosas y generar molestias con contraexplosiones.
Desde el área de Tránsito y Nocturnidad, su director remarcó la preocupación por la conducta de algunos motociclistas, quienes circulan sin control del rodado, poniendo en riesgo su vida y la de terceros.
En ese sentido, hizo un llamado a las familias de estos jóvenes para que dialoguen y tomen conciencia del daño que están generando, muchas veces sin dimensionar las consecuencias.
Además, se confirmó que una de las motos secuestradas tenía pedido de captura activo, lo que refuerza la necesidad de mantener este tipo de controles preventivos en la vía pública.