Este miércoles 10 de septiembre, en la sede de la Dirección de Salud Mental de San Pedro (Ituzaingó 979), se realizó un acto con motivo del Día Mundial de la Prevención del Suicidio. La actividad, que comenzó a las 18.30, reunió a autoridades, profesionales y vecinos, y tuvo como eje central el discurso del director de Salud Mental, Hernán Gorini, quien brindó su primera exposición pública desde que asumió el cargo.
En la apertura, Gorini subrayó el valor de visibilizar la problemática del suicidio y señaló que la sola presencia y disposición para hablar ya constituye un compromiso:
“Hacer presencia, venir a hablar y poner el cuerpo en una problemática tan delicada y difícil ya es un acto político, un acto de coraje”.
El sistema de salud y la sobrecarga de demandas
El director reconoció que el sistema de salud atraviesa una situación crítica, atravesado por las problemáticas sociales y económicas actuales. En este contexto, destacó el esfuerzo cotidiano de los equipos que trabajan al límite de su capacidad:
“Estamos sobrepasados en la demanda, trabajando siempre hasta el final y dando nuestro mejor esfuerzo”.
Gorini evitó apoyarse en estadísticas para referirse al suicidio, aclarando que las cifras sirven solo a los equipos técnicos en la planificación de dispositivos, pero no para un abordaje público:
“No me parece ético hablar de números fríos cuando se trata de personas, de historias, de familias”.
La problemática como lucha colectiva
Definió al suicidio como un fenómeno que atraviesa a toda la sociedad y que debe entenderse como una lucha compartida:
“A mí me gusta hablar de lucha contra el suicidio, porque hay cosas que no pueden prevenirse y otras que sí. Pero sin duda es una lucha de la sociedad, de las instituciones y de todos los que trabajamos hermanadamente”.
Reconocimiento al equipo y al trabajo en red
Gorini resaltó el trabajo de todo el personal —psicólogos, psiquiatras, terapistas ocupacionales, acompañantes terapéuticos, trabajadores sociales y administrativos— y agradeció el apoyo del municipio, de la directora del Hospital, Isabel Carrasco, y de los distintos servicios con los que coordinan diariamente.
“Es un buen momento para reconocer el área y agradecer a todos los que nos ayudan a sostener este trabajo. Desde la gestión hospitalaria hasta los acompañantes sociales, todos hacen un esfuerzo enorme para que el servicio funcione día a día”.
También mencionó la colaboración de Andrea Morón y Agustín Raviola, quienes llevan adelante un grupo de atención los días miércoles, y valoró la implementación de dispositivos grupales como una herramienta de contención en situaciones de crisis.
Adolescentes: la población más vulnerable
Uno de los tramos más relevantes del discurso fue el referido a la población adolescente, a la que Gorini identificó como el sector de mayor vulnerabilidad:
“Tenemos un montón de pacientes adolescentes con ideaciones, autolesiones y distintas manifestaciones de padecimiento subjetivo. Es fundamental trabajar mucho con las escuelas y el ámbito educativo, porque son nuestro futuro y la prioridad de la comunidad”.
En este sentido, sostuvo que el área seguirá reforzando la articulación con instituciones educativas y dispositivos comunitarios para atender la creciente demanda.
El rol del sistema público
Gorini fue contundente al destacar el papel del sistema de salud pública, que muchas veces asume la responsabilidad frente a la ausencia de las obras sociales:
“Como servicio público venimos dándole la cara y haciéndonos presentes cuando incluso las obras sociales, incluso las más altas, no responden”.
Al mismo tiempo, planteó la necesidad de seguir sumando recursos y ampliar el alcance de nuevas disciplinas como psicopedagogía y psicobiología para fortalecer la atención.
Cierre: compromiso y lucha cotidiana
Para finalizar, Gorini agradeció profundamente a cada integrante del equipo y llamó a mantener el compromiso colectivo:
“Todos podemos atravesar una crisis de salud mental en la familia o necesitar el servicio en algún momento. Lo más importante es seguir impulsando el área, trabajar juntos y luchar día a día por la salud mental de nuestra comunidad”.
Este informe refleja de manera integral el mensaje de Gorini: reconocimiento al esfuerzo del equipo, visibilización del suicidio como una problemática social, la centralidad de los adolescentes como grupo de riesgo, la necesidad de más recursos y el valor del sistema público frente a la desatención de las obras sociales.