En la antesala de la temporada estival, personal de la Prefectura Naval Argentina reforzó los controles sobre embarcaciones deportivas y motos de agua en el río Paraná, en la región del delta que comprende San Pedro, Ramallo y San Nicolás, con el objetivo de garantizar una navegación más segura y ordenada ante el incremento de actividad náutica en los últimos días.
Los operativos se desarrollan frente a las costas de estas localidades y abarcan verificaciones exhaustivas de documentación obligatoria para navegar, capacidad de pasajeros autorizada, así como test obligatorios de alcoholemia y narcolemia a quienes operan embarcaciones y motos de agua.
Según informaron desde la fuerza de seguridad, los límites permitidos de alcohol en sangre son 500 miligramos por litro para embarcaciones a motor y 200 miligramos por litro para motos de agua, de acuerdo con las normas vigentes para actividades náuticas deportivas.
Las infracciones detectadas pueden derivar en multas millonarias, con un régimen de sanciones que contempla desde montos menores hasta penalidades que, dependiendo de la gravedad, pueden superar los 4 millones de pesos, así como la posible suspensión del permiso de navegación o la intervención directa sobre la embarcación.
Desde Prefectura remarcaron que negarse a realizar los tests constituye en sí mismo una falta, y que únicamente se permite la continuidad de la navegación si otro conductor habilitado y en condiciones psicofísicas normales puede hacerse cargo.
La medida se enmarca en la creciente presencia de náutica recreativa en este corredor fluvial bonaerense, donde las altas temperaturas y el movimiento de turistas y vecinos atraídos por el río potencian la importancia de asegurar condiciones adecuadas de navegación y convivencia en el agua.
Fuente: Infobae
