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Un acontecimiento natural extraordinario puso en jaque la operatividad del Puerto de San Pedro, cuando el buque YASA TOKYO, con 33 mil toneladas de trigo destinadas a Angola, quedó varado en pleno canal de acceso al intentar zarpar el pasado viernes 23 de mayo.

La embarcación de gran porte, que había completado su carga sin inconvenientes entre el 18 y el 23 de mayo en el Muelle Cerealero, se detuvo de manera abrupta a la altura de las balizas 1 y 2 del canal, apenas comenzado su derrotero habitual de salida. Los registros al momento de la partida mostraban condiciones aparentemente seguras: un calado de 10,05 metros, altura de agua de 1,35 metros y una determinante establecida por Prefectura Naval Argentina de 9,80 metros, tras el reciente dragado del vaso portuario.

Sin embargo, al verificar la zona tras el incidente, se constató un repentino descenso en la profundidad del canal, con valores que oscilaron entre 7,5 y 8 metros. El hecho no tiene antecedentes recientes y motivó una inmediata intervención técnica por parte del Consorcio de Gestión del Puerto, que ordenó la realización de sondeos, imágenes satelitales, análisis con drones y batimetría.

Lluvias intensas y un fenómeno hidrosedimentológico inesperado
Las investigaciones revelaron que la causa principal fue un fenómeno hidrosedimentológico originado por las fuertes precipitaciones que afectaron al norte bonaerense entre los días 16 y 17 de mayo. En las cuencas de los arroyos El Tala y Arrecifes se registraron hasta 500 mm de lluvia, lo que incrementó significativamente el caudal del Riacho Baradero.

Este aporte de agua generó un cambio en el sentido de la corriente, que comenzó a fluir en dirección contraria, desde el sur hacia el norte, arrastrando grandes volúmenes de sedimento que fueron depositados justo en el Canal de Acceso al Puerto, en dirección al vaso portuario.

Imágenes captadas por satélite y drones muestran claramente el material en suspensión, contrastando con la superficie habitual del canal. Se estima que la sedimentación alcanzó los 3 metros de espesor, una magnitud suficiente para bloquear la maniobra de buques de gran calado.

El buque fue liberado y volvió a puerto
El 25 de mayo, con la intervención de tres remolcadores, el buque logró ser liberado y trasladado nuevamente al Muelle Cerealero, donde permanece amarrado mientras se evalúan los próximos pasos.

⚠️ Dragado urgente: lo que viene
El informe técnico concluye que para restituir la operatividad del puerto será necesario un dragado de emergencia de más de 300.000 m³, lo que equivale a tres años de sedimentación normal del río Paraná y triplica el volumen refulado durante el último dragado realizado a inicios de mayo.

El episodio ha sido catalogado como un hecho de fuerza mayor, derivado de condiciones naturales imprevisibles, que deja al descubierto la vulnerabilidad operativa del sistema portuario frente a eventos climáticos extremos.