Un edificio que nunca volvió a abrir
La esquina de Facundo Quiroga y Belgrano lleva años marcada por el silencio. Allí funcionó la Clínica Privada San Pedro S.A., que cerró sus puertas en julio de 2021 dejando a más de 30 trabajadores en la calle y a la comunidad con un vacío en materia de salud privada
Durante este tiempo, distintas versiones circularon sobre una posible reapertura: hubo promesas de inversores, reuniones con autoridades locales e incluso anuncios mediáticos que aseguraban que la clínica volvería a funcionar. Sin embargo, nada de eso se concretó. El edificio permaneció cerrado, deteriorándose con el paso de los años.
Justo dos años antes de confirmarse el remate, el 19 de agosto de 2023, el intendente Cecilio Salazar había sido invitado a recorrer lo que entonces se anunciaba como la “Nueva Clínica San Pedro”, bajo la conducción de un nuevo grupo inversor.
“Junto al secretario de Salud, Dr. Pablo Pichioni, fuimos invitados a recorrer la Clínica San Pedro en la que sus nuevos propietarios trabajan para lograr su reapertura. En el centro asistencial fuimos recibidos por los accionistas Gabriel Hanna, Matías Biglia y Sergio Lillia, quienes nos brindaron información sobre los avances de las obras que se estaban llevando a cabo”, señaló en aquel momento el intendente.
Y agregó: “Recuperar este prestador de servicios de salud para el sector privado y las obras sociales es muy importante, y del mismo modo volver a generar las fuentes de trabajo que se perdieron hace dos años. Por eso seguimos con atención todo este proceso, esperando que se inicie pronto una nueva etapa”.
Sin embargo, aquella expectativa nunca se concretó, y la reapertura prometida terminó diluyéndose en el tiempo hasta llegar a la instancia judicial actual que definió el remate del edificio.
Mayo de 2024: la promesa que desmintió el remate
En mayo de 2024, cuando ya circulaban versiones sobre un posible remate del edificio tras la visita de un martillero para tasar las instalaciones, uno de los accionistas, Gabriel Hanna, salió públicamente a negar esa posibilidad.
En declaraciones radiales, sostuvo: “Se trata de una constatación legal por un juicio laboral en trámite en San Nicolás, acá no habrá ninguna subasta”. En esa oportunidad, aseguró que junto a su grupo inversor seguían trabajando para poner en funcionamiento la clínica, con la parte edilicia prácticamente finalizada y con aparatología ya adquirida.
Incluso compartió un video mostrando equipos médicos y destacó que más de 40 personas esperaban la reapertura para comenzar a trabajar. “No pensamos en semejante inversión para que después se remate”, señaló entonces, aunque advirtió que no pondrían plazos para no generar falsas expectativas, ya que aún quedaban trámites de habilitación pendientes.
A más de un año de aquellas declaraciones, la realidad terminó contradiciendo esas afirmaciones: el proyecto nunca se concretó y la Justicia avanzó en el proceso de subasta que hoy tiene fecha confirmada.
La etapa más triste de esta historia
El 7 de julio de 2021 la Clínica San Pedro cerró sus puertas de manera abrupta. La decisión dejó a 70 trabajadores sin empleo y obligó al traslado de los pacientes internados, en medio de la crisis sanitaria por el COVID-19.
Ese mismo día, dos pacientes que se encontraban en la Unidad de Terapia Intensiva con coronavirus fueron derivados de urgencia al Hospital Público, pero fallecieron pocas horas después. El episodio generó una fuerte conmoción en la comunidad, marcada por el dolor y la indignación
El fallo judicial que cambia la historia
El juez Nicolás Aparisi, del Tribunal de Trabajo Nº 3 de San Nicolás, ordenó el remate judicial del inmueble, con el objetivo de indemnizar a las exempleadas que no habían recibido lo que les correspondía tras el cierre.
Lo novedoso del caso es que la clínica no fue declarada en concurso ni en quiebra, algo que suele diluir los pagos entre múltiples acreedores. Aquí, la prioridad será para las trabajadoras, lo que convierte al fallo en un precedente histórico en materia laboral.
Detalles de la subasta
El proceso se llevará a cabo de manera electrónica a través del Portal de Subastas Judiciales, y estará a cargo de un martillero designado.
Fechas de subasta: Desde el 8 de septiembre de 2025 a las 10:00 hs hasta el 19 de septiembre de 2025 a las 10:00 hs.
Precio base del inmueble: $84.639.786.
Depósito en garantía: 5% del monto base ($4.231.990).
Visitas al inmueble: Los interesados podrán recorrer las instalaciones los días 25, 26 y 27 de agosto de 2025, en el horario de 9:00 a 12:00 horas.
Se estima que la deuda total supera los 100 millones de pesos, incluyendo indemnizaciones y deudas con proveedores. El dinero obtenido del remate se destinará prioritariamente a las trabajadoras.
Una herida abierta en la salud sampedrina
La caída de la clínica significó mucho más que un conflicto laboral. Para San Pedro, representó la pérdida de uno de los pocos espacios privados de atención médica de mediana complejidad, lo que recargó aún más el sistema público de salud.
El cierre de sus puertas también dejó en evidencia la fragilidad de las instituciones privadas de salud en ciudades del interior, donde la rentabilidad, las deudas y la falta de políticas de sostenimiento terminan impactando directamente en los trabajadores y en los pacientes.
Con la confirmación del remate, se cierra definitivamente el capítulo de la “nueva clínica” que nunca reabrió. A nivel judicial, será una reparación parcial para quienes sostuvieron años de lucha en defensa de sus derechos laborales.
A nivel comunitario, el destino del edificio aún es incierto: dependerá de quién se convierta en el nuevo propietario y del uso que se le otorgue a un inmueble que alguna vez fue símbolo de salud privada en San Pedro y que hoy es parte de una historia de frustraciones y reclamos
Este proceso judicial no solo marca un punto final para la ex Clínica San Pedro, sino que abre una discusión más amplia sobre el acceso a la salud, la sostenibilidad de los centros privados y la responsabilidad del Estado en garantizar la cobertura sanitaria de la población.