La muerte de un joven en Baradero generó consternación y abrió una investigación que actualmente se encuentra caratulada como averiguación de causal de muerte. Mientras la Justicia espera los resultados de la autopsia, se conocieron dos versiones contrapuestas: la del área de Seguridad municipal y la de la familia del joven fallecido.
En diálogo con FM Tiempo, el subsecretario de Seguridad, Gabriel Fontanari, explicó cómo se desarrollaron las intervenciones policiales y remarcó que hasta el momento no surgieron testimonios que mencionen agresiones.
“En ningún testimonio se habla de golpes o de golpiza”.
Fontanari detalló que a las 6.43 se recibió un llamado al 911 por una persona “en vía pública, exaltado, con algún problema de confusión” en Gallo 5, a una cuadra de la comisaría.
Según explicó:
“La oficial que estaba de guardia llega corriendo, convoca al SAME y recibe apoyo de un móvil policial para retomar su labor en la guardia. Cuando llega el policía y llega el SAME había varias personas en el lugar que ya declararon”.
El joven fue trasladado al hospital, donde se escapó retirándose los sueros. Minutos después, a las 7.43, un nuevo llamado alertó sobre una persona tirada en la vía pública en calle Malabia:
“Ahí llega personal policial y personal de SAME donde nuevamente lo trasladan al hospital y después el cuadro se agrava en el transcurso de la tarde y lamentablemente termina perdiendo la vida”.
Fontanari pidió cautela:
“No quiero explayarme mucho o decir una cosa técnicamente incorrecta. Hay que esperar el resultado de la autopsia que acredite cuál fue la causa de muerte. Ahora están trasladando el cuerpo, se va a hacer en la asesoría pericial de San Nicolás”.
También señaló que se tomaron múltiples declaraciones:
“Anoche se estuvieron tomando declaraciones en la fiscalía hasta pasadas las 2 de la mañana”.
“Gente que a través de verlo en publicaciones y cuando vio que la familia pedía esto, se acercó voluntariamente a testimoniar, a comentar lo que vio al momento de las dos veces que se lo fue a buscar. Alguien que estaba con él también se presentó voluntariamente y testificó. Está armado prácticamente todo el recorrido porque vecinos aportaron cámaras y se socializaron con la familia”.
Y reiteró:
“Esperemos el resultado de la autopsia que acredite si esos son golpes o puede ser producto de alguna otra situación. Tenemos que tener mucha reserva y precaución con respecto a esto, pero hay muchos testimonios que se fueron levantando”.
“Pero en ningún tramo de las declaraciones tomadas anoche hasta muy tarde, ningún testigo acredita que lo hayan golpeado. Prácticamente nadie.”
El fuerte testimonio de la madre
En exclusiva por FM Tiempo, la mamá del joven, Gloria Deleglise, dio un relato completamente distinto y acusó directamente a la policía.
“Estaba golpeado, deformado, todo roto”.
La mujer sostuvo:
“El fiscal nos está dando vueltas, no nos da bolilla. A mi hijo lo llevaron por segunda vez al hospital la policía, y el chico no estaba así cuando entró. Cuando volvió por segunda vez ya estaba golpeado, deformado, todo roto”.
Relató además lo ocurrido durante la tarde:
“A las 18 horas hizo el primer paro. Lo revivieron. A las 18:30 se terminaba el turno y en esa media hora lo estuvieron reviviendo, no lo pudimos ver. Me vine a mi casa y a la hora me llama el doctor que había hecho otro paro y no resistió. Tenía los riñones comprometidos, los brazos, la cabeza. De lo deformado que estaba parecía Frankenstein”.
Y manifestó su sospecha:
“Para mí la policía tuvo algo que ver con el hecho”.
Sobre la primera intervención médica, afirmó:
“La primera vez entró un poco excitado por la droga, sin golpes. Le pusieron el suero, calmante, y se escapa del hospital. Dan aviso a la policía, lo encuentran, no sé dónde lo habrán llevado, y ahí le dan una golpiza tremenda. Hoy tengo a mi hijo muerto por eso”.
También rechazó la versión policial sobre su comportamiento:
“La policía dice que andaba cerca de la comisaría, que andaba queriendo meterse en casas. Es mentira. Él es re inofensivo, menos de robar, cero”.
Y sostuvo:
“Lo agarraron a cachiporrazos. El cuello lo tenía como una pelota. Le dejaron los riñones sin funcionar. La cabeza como una pelota. Todo destruido lo dejaron”.
La investigación continúa
La fiscalía sigue tomando testimonios, analizando cámaras aportadas por vecinos y espera el informe de la autopsia para determinar qué ocurrió entre el primer ingreso al hospital y el segundo traslado.
