Bloqueos sindicales: quiénes son los empresarios que le pudieron torcer el brazo al clan Moyano en la Justicia

Cansados de las protestas extorsivas, dueños de pymes se unieron desde hace un año para enfrentar al poder sindical y lograron la detención de dos altos dirigentes de Camioneros en San Nicolás. Pasaron de 18 a 122 miembros en todo el país. Sus historias. Cómo vencieron el miedo

No son magnates que nadan entre billetes ni representantes de multinacionales, sino dueños de pymes familiares que sufren lo mismo -o muchísimo más- que cualquier empresa de la Argentina en esta época inclemente para los negocios y se unieron para enfrentar un padecimiento adicional, casi único en el mundo: los bloqueos sindicales, esa modalidad extorsiva de protestas que se puso de moda aunque está asociada con las patotas y la violencia gracias a la tolerancia de muchos funcionarios y la pasividad de algunos jueces.

Son los integrantes del Movimiento Empresarial Anti Bloqueos (MEAB), creado hace un año como fruto de la iniciativa -o la indignación, en realidad- de Verónica Razzini, una de las dueñas de una empresa familiar de Rosario que distribuye materiales de construcción y a la que el Sindicato de Camioneros de Santa Fe bloqueó durante tres meses. En un trabajo codo a codo junto con la abogada Florencia Arietto, Razzini fue armando pacientemente una red de empresas que son víctimas de bloqueos para brindarles asesoramiento legal, compartir sus experiencias y darles recomendaciones, contención emocional y claves para frenar este tipo de medidas de fuerza.

Trabajan a pulmón, sacándoles horas al trabajo en sus empresas y sin apoyos económicos ni políticos (más bien, todo lo contrario). Y, sobre todo, desafiando al miedo. Algunas batallas contra la prepotencia sindical se han perdido y la mayoría ni siquiera se denuncia, pero con el paso de los meses fueron logrando fallos judiciales favorables que ratificaron que los bloqueos son un delito.

La resolución más impactante, sin embargo, fue dictada hace 24 horas por la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal de San Nicolás, que dejó en firme el pedido de detención de dos altos directivos del Sindicato de Camioneros de esa ciudad bonaerense: Maximiliano Cabaleyro, titular del Sindicato de Camioneros nicoleño y concejal del Frente de Todos, y el dirigente Fernando Espíndola.

“Frente a este fallo lo que sentimos es esperanza y, al mismo tiempo, el compromiso de difundir nuestra tarea para que los empresarios den pelea contra la extorsión”, afirmó a Infobae Ariel Rey, quien, junto con su hermano Gustavo y su papá Ricardo, son los dueños de una distribuidora de productos alimenticios de San Pedro, fundada en 1989 y con 35 empleados, que fue bloqueada en dos oportunidades en febrero de 2021 luego de que se negaron a seguir pagándole a los gremialistas una suma de dinero de manera irregular.

“En un momento dijimos basta, esto es inviable -recordó-. El sindicato te pide dinero a cambio de trabajar en paz. A todos les piden eso y todos los empresarios sabemos que ocurre. Pero si este sistema corrompido está funcionando es porque lo permitimos los empresarios. Tenemos una mirada equivocada: ellos (los sindicalistas) son poderosos porque nosotros los hacemos poderosos. Por eso estoy en el MEAB. Queremos difundir que el empresario no dé más coimas. ¿Si tengo miedo? No, siento orgullo de lo que hicimos”.

Rey, cuyo padre se hizo famoso por un video en el que lloraba por la intimidación sindical, dialogó con este medio luego de un largo encuentro de 12 miembros de la conducción del MEAB, en un hotel céntrico porteño de tres estrellas. La mayoría llegó desde el interior. Como tantas otras veces, analizaron las denuncias de bloqueos que reciben y se repartieron las tareas para asistir a los empresarios que piden ayuda. Incluso comenzaron a debatir un estatuto porque están en plenas gestiones para obtener su personería jurídica.

El empresario admitió que no esperaba la detención de los sindicalistas de Camioneros, sino sólo la indagatoria. “Se ve que las pruebas que aportamos y que consiguió la Justicia eran contundentes”, destacó. En la causa judicial pudieron incorporarse videos, grabaciones, declaraciones testimoniales y hasta una caja de cartón con 500.000 pesos y dos cheques que recibieron en mano los dirigentes para la “paz social” y que habrían probado el mecanismo de extorsión (a cambio, curiosamente, a los dueños de Distribuidora Rey se les extendió un recibo con el membrete de la obra social de Camioneros que llevaría la firma de Cabaleyro).

Damián Doboletta, propietario junto con su familia de una pyme de transporte en Zavalla, Santa Fe, sufrió 8 días de bloqueos del Sindicato de Camioneros de Santa Fe, dirigido por Sergio Aladio, un opositor de Hugo Moyano, luego de que negaron a pagarle “deudas inventadas”. Fue en 2019 y la empresa no pudo trabajar porque impedían la salida de los camiones. “No teníamos de dónde agarrarnos -reconoció-, todo el mundo nos daba la espalda y el Ministerio de Trabajo provincial era muy funcional al sindicato”. Una vez que Arietto se puso al frente del caso, las denuncias penales empezaron a dar vuelta la historia. Como los sindicalistas que bloquearon la empresa fueron los mismos que extorsionaron a la compañía de Razzini, las causas se unificaron y hubo una decena de activistas presos.

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https://www.infobae.com/politica/2022/04/09/bloqueos-sindicales-quienes-son-los-empresarios-que-le-pudieron-torcer-el-brazo-al-clan-moyano-en-la-justicia/?fbclid=IwAR1I_SwPPYUWhyeNiJMPy2gsJqYOS70SQdZNTd887pNDXQxQeUi-Z2toIaM